skip to main | skip to sidebar

About me

Mi foto
Clow Ceridwen
Un blog en el que simplemente relatare lo que a mi mente le dé por imaginar =)
Ver todo mi perfil

Archivo del blog

  • ► 2012 (2)
    • ► julio (1)
      • ► jul 18 (1)
    • ► marzo (1)
      • ► mar 22 (1)
  • ► 2011 (4)
    • ► septiembre (1)
      • ► sept 07 (1)
    • ► agosto (1)
      • ► ago 06 (1)
    • ► enero (2)
      • ► ene 25 (1)
      • ► ene 15 (1)
  • ▼ 2010 (53)
    • ► diciembre (2)
      • ► dic 10 (1)
      • ► dic 09 (1)
    • ► noviembre (3)
      • ► nov 16 (1)
      • ► nov 12 (1)
      • ► nov 02 (1)
    • ► octubre (1)
      • ► oct 11 (1)
    • ► septiembre (3)
      • ► sept 20 (1)
      • ► sept 05 (1)
      • ► sept 02 (1)
    • ► agosto (2)
      • ► ago 31 (1)
      • ► ago 24 (1)
    • ► julio (2)
      • ► jul 24 (1)
      • ► jul 01 (1)
    • ► junio (12)
      • ► jun 21 (2)
      • ► jun 16 (1)
      • ► jun 13 (1)
      • ► jun 12 (1)
      • ► jun 09 (2)
      • ► jun 06 (1)
      • ► jun 04 (1)
      • ► jun 03 (2)
      • ► jun 01 (1)
    • ► mayo (6)
      • ► may 27 (1)
      • ► may 23 (1)
      • ► may 13 (1)
      • ► may 07 (2)
      • ► may 03 (1)
    • ▼ abril (16)
      • ► abr 29 (1)
      • ► abr 27 (1)
      • ▼ abr 26 (1)
        • The sweet Alice
      • ► abr 24 (1)
      • ► abr 22 (1)
      • ► abr 19 (1)
      • ► abr 16 (1)
      • ► abr 15 (1)
      • ► abr 14 (2)
      • ► abr 13 (2)
      • ► abr 12 (2)
      • ► abr 08 (1)
      • ► abr 06 (1)
    • ► marzo (6)
      • ► mar 29 (1)
      • ► mar 26 (1)
      • ► mar 24 (1)
      • ► mar 23 (2)
      • ► mar 22 (1)
Con la tecnología de Blogger.

La verdad del payaso

The sweet Alice

26.4.10





Viento cálido que susurraba palabras ininteligibles. Flores altas y delgadas con rostros dormidos. Ruidos provenientes de criaturas que seguramente no conocía. Crujir de hojas secas bajo su cuerpo. Humo en el aire. Sabor amargo de “Drink me” en la boca. El pelo rubio y ondulado librado de la cinta que le apretaba el moño al cráneo. Sonrisas de gato en la luna.


Con su vestido nuevo echo a su nueva medida, corrió ante una bestia sin saber por qué la perseguía. Corría y corría sin detenerse, haciéndole de pronto caso a su locura y parando de pronto frente a el. “No puede hacerme daño, es un sueño, es un sueño…” Se repetía una y otra vez, incluso cuándo llegó a sentir su aliento nauseabundo inundándole las fosas nasales y le arañó con sus grandes zarpas su brazo derecho, marcándola con una herida que poco a poco se iría tornando negra. Volvió a hacerle caso al poco sentido común que podía permitirse allí, en ese lugar desconocido de “su mente” y corrió.

Retumbar de trompetas. Naipes rojos. ¿Naipes rojos? Gritos: ¡Que la corten la cabeza! Risas nerviosas de algún loco más que ella con un sombrero extraño sobre su cabeza, acudiendo en su ayuda.  “Alicia, llegas tarde, ¿Lo sabías? Traviesa…”Al final de la carrera con la bestia extraviada: La mirada cálida de la reina de nieve, con su espada gélida posándola en sus manos temblorosas, pero la recibió con una seguridad que no sabía de dónde provenía, como la de alguien que sabe que tiene que hacer algo pero la diferencia era que ella no sabía el qué.

El terreno se convirtió de pronto en un inmenso tablero de ajedrez, ella: una guerrera cayendo de bruces contra el suelo, el escudo lejos de su vista. Sobre ella: Galimatazo.
Galimatazo.
“Tus seis cosas imposibles antes de desayunar… vamos… ¡Enuméralas!”
Entrechocar de espadas a su alrededor, acero contra acero, gritos contra gritos, el rugir de los desgarros, el olor de la muerte.


“ Uno: La poción que te hace encoger ”
“Dos: La tarta que te hace crecer”
“Tres: Los animales hablan”
“Cuatro: Los gatos se evaporan”
“Cinco: El pais de las maravillas existe”
“Seis:… Puedo matar al Galimatazo”
Y su cabeza rodó por el suelo. La partida de ajedrez terminó. Y ella bebió su sangre y…


Se “despertó” sobresaltada en mitad de la noche, con la piel perlada de sudor frío y sintiendo un calosfrío trepándole por la espina dorsal. De nuevo las pesadillas. Creía que iba a volverse loca, que, más bien, ya estaba loca… Aunque su padre siempre le había dicho que los locos y los majaretas eran las mejores personas que existían, así que al menos eso la tranquilizaba; y la enseñó a huir de esos sueños pellizcándose en un brazo, por ejemplo. Pero sintió un extraño escozor en el brazo, y descubrió asombrada una herida que no tenía antes, la herida de la bestia que la perseguía. Y entonces comprendió. Esta vez no había sido un sueño. Comprendió su quinta cosa imposible de antes de desayunar: El país de las maravillas existe.

Publicado por Clow Ceridwen en 1:06 a. m. 2 comentarios    

Etiquetas: Otros

Entradas más recientes Entradas antiguas Inicio
Suscribirse a: Entradas (Atom)

Blog Design by Gisele Jaquenod

Work under CC License

Creative Commons License